La Iglesia-Museo de Sta. Eulalia en Paredes de Nava está declarada Bien de Interés Cultural (B.I.C.).

El encargo surge ante la necesidad de acometer una actualización de las salas y los recorridos del museo parroquial de Santa Eulalia. Se persigue una mejora de las condiciones de acceso a la torre (a su interior, y hasta el cuerpo de campanas) y posibilitar el establecimiento de un recorrido más útiles y atractivos para el visitante, acorde con las necesidades de los nuevos planteamientos museográficos que próximamente se desarrollarán de Sta. Eulalia dentro del proyecto denominado “Por Campos del Renacimiento”. El presente proyecto únicamente incluye las actuaciones de habilitación de accesos (recorridos y pasarelas) a la torre. El acondicionamiento de los espacios en los que se actúa, incluyendo sus instalaciones. Año 2019.

Se trata de un templo de grandes dimensiones cuya puerta principal se abre en el lado de la Epístola bajo pórtico. Declarado BIC en 1962, consta de tres naves de piedra de sillería, producto de sucesivas ampliaciones y reformas desde época medieval, si bien predomina la configuración gótica (siglos XV-XVI) que incluye elementos románicos anteriores y soporta elementos posteriores mudéjares y barrocos. La torre es la mejor síntesis de esta continuidad histórica, con sus cuerpos inferiores románicos sorprendentemente incorporados al espacio interior, su ampliación gótica, y su cuerpo superior de ladrillo de estilo mudéjar rematado por una cubierta apiramidada del XVII decorada con teja cerámica vidriada de distintos colores y motivos geométricos. Alberga el templo un museo, primero de carácter parroquial en España, que cuenta con una extraordinaria colección de bienes muebles entre los que destacan tablas de Pedro Berruguete (tablas de los Reyes de Israel y otras) y esculturas de Alejo de Vahía, Alonso Berruguete o Esteban Jordán, entre otros. Se ubica en diversas dependencias situadas principalmente hacia el norte y a los pies del templo.


La torre consta, según las divisiones que se observan desde el exterior, de seis cuerpos separados entre sí por una imposta de piedra. Los cuatro inferiores ejecutados en sillería caliza son de época románica con vanos de pequeñas dimensiones cerrados por arcos de medio punto, varios de ellos flanqueados por columnillas. El quinto cuerpo también de sillería, aún de época medieval, presenta grandes ventanales con arcos ojivales, mientras que el cuerpo superior, de ladrillo, tiene decoración de tradición mudéjar (siglos XVI-VII), al igual que el chapitel que le rematada.


La torre en la actualidad alberga en sus interior dos de las salas del museo (que hemos denominado para este proyecto ”Sala inferior torre” –nivel +0.17- y “Sala superior torre” – nivel +8.09-”). Singularmente, una tercera sala, situada entre las dos citadas, en este momento se encuentra sin uso y no cuenta con escalera de acceso, la hemos llamado “sala intermedia torre” – nivel +4.94-. El origen de esta sala está en la división vertical en dos de una sala mayor, que se desarrollaba en altura entre el nivel +4.94 y la bóveda de la Sala superior torre. El forjado de madera – de elementos reutilizados- que conforma la división se apoya sobre una precaria estructura de pies derechos que descansan sobre la bóveda inferior de la torre. A esta sala se llega a través de un vano que se abre sobre el actual coro.


Sobre la “Sala superior torre” se ubica el campanario situado en los cuerpos altos de la torre. Para acceder hasta ellos se emplea actualmente una diminuta y peligrosa escalera que partiendo de la Sala del Baptisterio alcanza uno de los vanos del cuerpo románico (nivel +13.86), a través del cual se pasa al interior de la torre. Esta escalera tiene su origen en la reforma llevada a cabo en el templo en los años 60 del pasado siglo para acondicionar las salas del museo, posiblemente con la construcción de este acceso se produjo la anulación y tabicado de la escalera de caracol que partiendo de la Sala Superior de la Torre alcanza el campanario. Esta escalera medieval probablemente tuvo en origen continuidad hacia la parte inferior de la torre, estos tramos en todo caso se encuentran hoy anuladas y colmatados por morteros de cal y canto. Se sitúan situada en la esquina suroeste de la torre. En algún momento, que pudo coincidir con la construcción de la magnífica escalera de caracol que desde la Antigua Sacristía (Sala Inferior Museo) lleva a la Sala Superior del Museo, esta escalera se elimina (quizá por las grietas existentes en esa zona de la torre aconsejaron colmatarla para consolidar esa esquina, debilitada por la presencia de la propia escalera).


Los niveles superiores de la torre (Campanario), se encuentran deteriorados por la situación de intemperie a la que está sometida la madera que conforma escaleras y forjado, si bien los elementos estructurales principales se mantienen en buen estado.


Cabe señalar, que dadas las condiciones geométricas de la torre y su condición de BIC (que impide modificaciones en su configuración), no es posible habilitar un recorrido accesible para personas con discapacidad por el interior de la torre, restringiéndose los recorridos adaptados al nivel de acceso del templo.